EL AYUNTAMIENTO DE GIJÓN VUELVE A LA LUCHA CONTRA EL PICUDO ROJO
Cuatro años después de abandonar la lucha contra el picudo rojo de las palmeras, el Ayuntamiento de Gijón vuelve al combate y saca a concurso el tratamiento preventivo de sus palmeras canarias.
Seguramente ha tardado mucho en reaccionar y lo ha hecho empujado por una opinión pública alarmada por la pérdida de esas plantas tan queridas por la sociedad asturiana. Pero , aún así, es un primer paso importante que inicia un camino a seguir por todas las administraciones públicas responsables del patrimonio paisajístico y cultural del Principado, como son el Gobierno y el resto de Ayuntamientos de las zonas afectadas.
DE MANERA INSUFIENTE
Los términos del concurso nos dan unos datos muy significativos que muestran la insuficiencia de la solución elegida. Me explico:
El concurso es para el tratamiento de las 60 palmeras canarias más importantes propiedad del ayuntamiento, ampliable si fuese necesario – que lo será – a unas 240.
Es decir se van a tratar menos del 3 % de las palmeras canarias existentes en el concejo – ya que hay más de 2100 unidades – y puede ser que esta cifra más tarde alcance al 11,5%.
¿ Y qué pasará con el resto de las palmeras? ¿ Las evitará el picudo o las matará y se reproducirá dentro de ellas? Las respuestas están claras y no necesitan más explicación.
La conclusión es que un tratamiento tan limitado, aunque sea efectivo durante un tiempo en unas pocas palmeras, conduce inevitablemente a la desaparición de las palmeras de Gijón.
TÉCNICAMENTE ADECUADA
El tratamiento de endoterapia elegido por los técnicos del Servicio de Parques y Jardines es una de las tecnologías más avanzadas existentes y consiste en la microinyección al estipe ( tronco de la palmera) con Emamectina. Tiene unas ventajas evidentes, como son:
- Pese a ser una técnica invasiva, el daño en el tronco de la palmera es menor que en las inyecciones convencionales y, por tanto, disminuye el riesgo de pudriciones.
- La Emamectina es una materia activa de eficacia probada en el control del picudo rojo.
- El producto utilizado es llevado por la savia de la palmera hasta la zona más apetecida por el picudo rojo y una vez allí perdura más tiempo. Por lo que son necesarios menos tratamientos al año; se dan dos como máximo.
- La endoterapia evita que el producto insecticida se disperse al aire libre y pueda afectar a las personas o a otros insectos útiles. Es por lo tanto un tipo de tratamiento respetuoso con el medio ambiente y utilizable en zonas urbanas.
PERO NO HAY UN PLAN DE CONTROL INTEGRADO DE LA PLAGA
Este tratamiento será acompañado en primavera por la colocación de trampas de feromonas para capturar picudos adultos y monitorizar de alguna forma la plaga. Esto se realizará con la ayuda del Sistema de Información Geográfica que ya posee la empresa pública EMULSA (Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano).
Sin embargo, no se proponen otros sistemas muy efectivos de control biológico como puede ser el empleo de duchas de nematodos, aunque este tratamiento esté limitado a los meses fríos.
Tampoco queda claro si la colocación de las trampas se realizará sólo en los espacios con palmeras gestionados por el ayuntamiento o se distribuirán de forma científica por el concejo.
COMO ENSEÑA LA EXPERIENCIA DE ELCHE
La experiencia de muchos años en Elche , donde se ha defendido con éxito el mayor palmeral de Europa , ha demostrado que la mejor forma de colocar las trampas es por zonas (1); de esta manera las trampas controlan todo el territorio, no solo donde se encuentran las palmeras municipales.
Pero más importante aún es que en Elche se ha seguido una estrategia de control integrado de la plaga que utiliza todas las técnicas disponibles a escala municipal: la importantísima detección precoz (2), la monitorización y control mediante trampeo, un sistema de información geográfica para evaluar la evolución de la plaga, las podas, los tratamientos mediante endoterapia, el control biológico, el control biotécnico, las cirugías de saneamiento y la destrucción de palmeras muertas e irrecuperables.
NI BUSCA LA COLABORACIÓN DE TODAS LAS PARTES IMPLICADAS
Además en Elche se ha logrado controlar el picudo rojo mediante la colaboración de todas las partes implicadas; es decir que ayuntamiento, particulares, empresas, universidad y gobierno regional han cooperado en el combate de la plaga.
Por eso aquí se debería hacer lo mismo. No basta que el Ayuntamiento defienda solamente sus palmeras, porque esas plantas están rodeadas de muchas otras en un territorio sin proteger. Tampoco que unos cuantos particulares traten sus plantas sin la asistencia técnica, ni la monitorización por parte del ayuntamiento. De hecho hay propietarios que se han adelantado a tratar sus palmeras, algunas de ellas situadas en jardines históricos importantes como el de Villa María.
Es necesario enfocar el problema de una manera integral que busque la colaboración de todas las partes.
Así, la administración municipal de Gijón puede luchar contra el picudo rojo de muchas maneras: puede elaborar un censo de todas las palmeras del concejo, puede alertar e informar a los propietarios particulares, puede ampliar la monitorización a todo el territorio a su cargo, puede ayudar a los particulares a tratar el picudo y , muy importante, a deshacerse de los restos, etc..
EL GOBIERNO DEL PRINCIPADO DE ASTURIAS TAMBIÉN DEBERÍA DEFENDER EL PAISAJE INDIANO
Pero aún así, eso sería insuficiente. Es necesario que el gobierno del Principado de Asturias vuelva a su política del año 18 y declare urgentemente como plaga al picudo rojo, de forma que se puedan tomar acciones conjuntas – como un censo global de palmeras- para combatir al picudo rojo en todo el territorio afectado. Tengamos en cuenta que este insecto volador no respeta los límites de concejos, ni espera a los trámites burocráticos.
El riesgo de perder un paisaje tan característico y tan arraigado en Asturias como es el paisaje indiano es muy alto y por ello es necesario que todos participemos en su defensa.
El combate contra el picudo rojo se ha abandonado durante mucho tiempo, pero aún podemos rectificar y evitar que desaparezcan nuestras palmeras.
(1) La colocación de trampas se hace a diferentes densidades según el objetivo del trampeo:
- 1 trampa/ha. en zonas libres de picudo rojo para monitorización del avance la plaga
- 4/trampas/ha. en zonas afectadas para captura masiva de los insectos.
(2) La detección precoz de la plaga es esencial para salvar las palmeras atacadas, ya que estas son irrecuperables cuando se observan síntomas muy claros como el desplome de las palmas .
Más entradas en el blog sobre este tema:
El Picudo Rojo amenaza las palmeras del Norte de España (2015)
El control del PICUDO ROJO en Asturias y la Lucha Integrada (2018)